lunes, 19 de octubre de 2009

LOS MUNDIALES, SENTENCIADOS PARA LOS ESPAÑOLES

Pues sí, Julián Simón ya es campeón del mundo de 125cc. Y este, será el único que logren los nuestros tras la carrera australiana. Las caídas de Lorenzo y Bautista, les dejan sin opciones de lograr su sueño.

En 250cc, apareció la suerte del campeón. La del campeón Simoncelli, que tras notar el aliento en la nuca de nuestro Álvaro Bautista, suspiro aliviado cuando este se cayó. Un nuevo error del talaverano que le descarta totalmente de la lucha por el titulo mundial. Y encima, la tremenda caída de Locatelli hizo que la carrera finalizara 6 vueltas antes de lo previsto, lo que provocó que en la última vuelta que sirvió para confeccionar la clasificación de la carrera, Aoyama fuera séptimo. Un tremendo zarpazo al mundial para el amigo “pelocho”, que se pone a tan solo 12 puntos del japonés con solo 50 en juego… O espabila el de Honda, o el año que viene Gresini tendrá a un bicampeón del mundo.



En MotoGp todo se decidió en la primera curva. Un error de Jorge Lorenzo al tocarse en la frenada con Hayden, le mandó al suelo sin posibilidades de volver a pista. El mallorquín, que en la anterior carrera nos había dado emoción para las próximas carreras, nos la quitó de golpe en apenas 600 metros. Una lástima, ya que lo estaba haciendo muy bien. Tan solo un autentico desastre puede hacer que Valentino no logre en Malasia su noveno título de campeón. Y veremos que tiene preparado para ello. Por lo demás, la carrera no tuvo mucha historia. Salida fulgurante del de siempre, Pedrosa, pero enseguida se vio que no tenía nada que hacer con el ritmo de Stoner y de Rossi. Valentino lo intento, pero al final sacó la calculadora y se conformó con unos buenísimos 20 puntos. Además, imagino que se lo pasó en grande viendo en primera fila las tremendas derrapadas que se marcaba Stoner vuelta a vuelta con su preciosa Ducati blanca.



Pero lo mejor pasó en la primera carrera. En la del octavo de litro. Fue una carrera típica del 125cc. Un grupo de pilotos, cambios de líder y cuando los dos pilotos de Aspar que tenían posibilidades de ganar el mundial apretaron el ritmo, se quedaron solos. Ahí, Smith se puso líder y parecía que todo iba a decidirse en la última curva del circuito, sí, esa en la que se han decidido tantas carreras (y mundiales, ¿os acordáis del año 2000 entre Nakano y Jacque?). Pero no, Julito se sacó de la manga una frenada imposible y dejó a Bradley totalmente descolocado ya que no se esperaba el ataque en esa curva. Ni siquiera pudo mantener la aspiración del español, que al pasar por meta se convertía en el nuevo campeón del mundo de 125cc. Enhorabuena Simón.



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